Aunque el
clima no acompañó, ya que el aire entorpeció el acto arrancando pancartas,
hojas de firmas y folletos informativos, el acto fue perfecto, pues ocurrió lo
más importante. Y es que la plaza de España de Albatera se llenó hasta la
bandera, más de 2000 personas se dieron lugar allí para expresar su más que
rotundo rechazo al macro-vertedero comarcal proyectado en la sierra de Albatera.
Allí se
habló de todos los perjuicios que podría tener dicha instalación para el
medioambiente, la salud pública y el desarrollo socioeconómico de la zona,
poniendo de manifiesto las oscuras y numerosas circunstancias que rodeaban todo
el proceso de adjudicación, que se haya incluido dentro del caso Brugal, investigación
judicial que trata de poner luz, sobre la presunta trama de corrupción político
empresarial con más de 100 personas imputadas, entre ellas un antiguo concejal
de Albatera, el antiguo presidente de la diputación provincial y consorcio del
plan zonal de residuos número XVII y el empresario al cual se le pretende
adjudicar el proyecto del macro-vertedero, conocido por su negligente gestión
de otras instalaciones de este tipo como la de Fontcalent en Alicante.
Nuestros amigos
y colaboradores de Vertivega trasladaron a la población la experiencia personal
de vivir junto a un vertedero durante muchos años y mediante un discurso magistral
escenificaron lo que es el día a día al lado de este tipo de instalaciones,
poniendo de manifiesto la dificultad para la vida cotidiana, y como
enfermedades respiratorias, alérgicas y el cáncer, hacían estragos aumentando
peligrosamente en los últimos años en los núcleos poblacionales del contorno.
“No al macro-vertedero”
gritaron esas más de 2000 personas al unísono, expresando así su negativa a que
este tipo de instalaciones se construyan aquí o en cualquier otro lugar, sin
tener en cuenta las molestias y perjuicios para los ciudadanos, esperemos que
este mensaje lanzado directamente hacia las autoridades políticas de la
comarca, la diputación provincial y la Generalitat valenciana, sean escuchadas
y que estas no hagan oídos sordos a la voluntad de los ciudadanos, que al fin y
al cabo, es a quienes deben de servir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario